Recorrido: Merlo (San Luis)- Chepes (La Rioja)
Km/Horas: 260 km en 7 horas.
Salida: 11 horas
Llegada: 18:10 horas
Parada técnica:
1. Pueblo Lafinur (La Rioja): Seba estaba muy cansado por haber tomado un analgésico para la contractura y decidió descansar un poco. Paramos en “La Plazoleta de la Madre” y salió una ronda de mates.
2. Pueblo Ulapes (La Rioja): Un pueblo muy pequeño y humilde, donde nos sentimos bastante observados al llegar. Lo llamamos “El Pueblo Fantasma”. Comimos unas frutas y descansamos unos minutos para estirar los músculos y seguimos viaje.
3. Pueblo Chepes (La Rioja): A las seis y diez de la tarde, cansados de la ruta, llegamos a Chepes y acampamos detrás de una estación de Servicio, en un Camping del ACA.
Anécdotas:
• “El Recado”: Mientras preparábamos la cena, se acercaron tres niños de entre 10 y 12 años a pedirnos “un recado” (el hacer un mandado a cambio de dinero), ya que su madre les había pedido que salgan a comprar pan y leche. Nos quedamos conversando con ellos. Nos contaron que iban a la escuela a la mañana y allá les proveían de un desayuno. Que solían juntar botellas de plástico por la tarde, porque les daban diez pesos al cambiarlas. Hablamos de las motos y de futbol. Por la noche, varios chicos se nos acercaban respetuosamente para pedirnos botellas. Se los veía educados, y bien intencionados, pero también muy necesitados. La pobreza es parte de nuestro país, y es fuerte verla tan de cerca. Pero a diferencia de otros lugares, en La Rioja los chicos buscaban de alguna actividad para recaudar dinero, ya sea reciclando o haciendo mandados, pero siempre con respeto.
DIA 18
Fecha: 27/04/10
Recorrido: Chepes (La Rioja)- Villa San Agustín del Valle Fértil (San Juan)
Km/Horas: 200 km en 5:30 horas.
Salida: 11:15 horas.
Llegada: 16:30 horas
Parada técnica:
El paisaje en la ruta iba cambiando a medida que cruzábamos de provincia. Cuando pasamos por Chucuma, la vista era preciosa: grandes y altas montañas, piedras y tierra colorada, cactus por doquier. En el límite entre La Rioja y San Juan, apreciamos los extensos valles salinos. Era hermoso ver la longitud de las tierras blanquecinas.
1. “El Desierto”: Paramos a descansar y apreciar el desierto. Estábamos en el medio de la nada. Comimos unas frutas, sacamos algunas fotos comunes y otras artísticas y seguimos adelante.
2. Parada Astica (San Juan): Estábamos famélicos y decidimos parar en el pueblito a comer algo. En la despensa “San Expedito”, nos atendieron de maravilla. Los chicos comieron un sándwich de milanesa y nosotros (los vegetas) dos pizzetas con huevo y queso. Mientras nos preparaban la comida nos jugamos un metegol, para recordar viejos tiempos. Astica es un pueblo de 500 habitantes, que viven del ganado vacuno y de las cabras. Está creciendo de a poco, aunque no tenga tanta oferta laboral. Van en busca de la tranquilidad que ofrece las afueras de la provincia.
3. Villa San Agustín del Valle Fértil (San Juan): Llegamos a la plaza principal y nos dirigimos a la oficina de Turismo. Nos comentaron de los atractivos turísticos y de los alojamientos. Después de recorrer en busca de precio y calidad, elegimos parar en el Camping “La Posta”, donde Freddy (el dueño), nos dio una cálida bienvenida.
Cenando con Fredy
Una noche de luna llena
Anécdotas:
1. Seba le salvó las papas a Freddy: Después de una rica cena, nos quedamos charlando y tomando un vinito junto a Freddy. Nos comentó que era maestro y director de una escuela rural, y que estaba colaborando junto a algunos colegas, a realizar donaciones a beneficio de los chicos. Estaba contento porque habían salido en el diario y tenía varias fotos del evento, donde jugaron al fútbol y compartieron el resto del día juntos. Estaba armando un informe en la computadora y se dio cuenta de que le habían desaparecido las fotos que había sacado; entró en pánico, porque tenía que utilizarlas para el informe. Ahí es donde entra Seba el salvador. Sacó un programa especial que se trajo de Buenos Aires para utilizar en casos de reparación de PC, y se encargó de buscar las fotos perdidas. Gracias al éxito de su trabajo, la alegría del profe por haber recuperado las fotos era indescriptible, a tal punto que nos regaló la estadía en el camping. Todos salimos ganando. ¡Gracias Freddy por tu colaboración!
Percances:
1. Pérdida en el tanque de Lu: A pesar de haberlo emparchado con SILOC la primera vez que comenzó a perder, no hubo caso. Durante la estadía en Villa San Agustín, Seba y Lu se encargaron de buscar a un soldador para realizar el mismo proceso que habíamos hecho con el tanque de Leandro. Además, tuvieron que arreglar el CDI y las bujías. La joda salió sus buenos pesos, pero bueno, es parte de la aventura del viajero ¿no?
2. El regulador de Leandro: La moto de Lea no se queda atrás. Aprovechamos la estadía en el Camping y Seba arregló el regulador, el freno delantero y las luces traseras. No podíamos continuar viaje sin antes reparar las motos. Lo único que no lograron resolver aún, fue la vibración.
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